Las intervenciones sociales también pueden ser de gran ayuda para personas con depresión. Para las personas con depresión leve, a veces suele ser suficiente con este tipo de intervenciones, mientras que personas con depresión moderada o grave pueden beneficiarse de este tipo de intervenciones de forma complementaria (además de la medicación y la terapia psicológica).

Los grupos de apoyo suelen ser útiles para adquirir nuevas habilidades, tener un estilo de vida más saludable y contar con apoyo social. Hay evidencia científica que indica que la realización de actividad física en grupo tiene efectos beneficiosos a la hora de reducir la depresión moderada. Grupos de apoyo entre personas con depresión, programas de TCC y de psicoeducación suelen ser muy útiles y hay organizaciones que los realizan a bajo coste.

Otros cursos que se ofrecen a nivel de instituciones públicas (como cursos de "Desarrollo Personal", "Manejo del Estrés", o "Habilidades para la Vida"), pueden proporcionar apoyo social y nuevas habilidades. Si te interesan este tipo de grupos puedes pedirle a tu médico de atención primaria que te indique donde puedes encontrarlos.